¿El equipamiento de tu negocio se ha quedado obsoleto? Si trabajas en la industria cerámica, el sector alimentario o el tratamiento de aguas residuales, las bombas lobulares industriales pueden representar una excelente inversión para modernizar tu compañía y mejorar su rendimiento. 

¿Te gustaría conocer sus ventajas? ¿Qué las diferencia de otras bombas industriales? A continuación, te contamos cómo funcionan, sus características operativas y sus usos y aplicaciones recomendados.

Bombas lobulares industriales: conceptos básicos 

Las bombas lobulares pertenecen a la categoría de bombas volumétricas o de desplazamiento positivo, cuyo funcionamiento se basa en la hidrostática. En este tipo de equipos, la energía necesaria para mover el fluido se genera mediante las variaciones de presión generadas dentro del contenedor donde está confinado. Dependiendo de la acción del elemento de bombeo, estas bombas volumétricas pueden clasificarse, a su vez, en bombas alternativas, como las bombas de pistones, o bombas rotativas, como las bombas peristálticas, las bombas de paletas o las bombas lobulares industriales, en las que nos centraremos a continuación.

Bomba lobular Boyser

En esta clase de bombas hidráulicas, el trasvase del fluido se genera por el movimiento de dos rotores redondeados o lóbulos, que giran en sentido contrario, impulsándolo a lo largo de la cámara. El cuerpo de la bomba está fabricado con materiales resistentes a la abrasión, como aceros inoxidables ferríticos o austeníticos, y los rotores pueden ser metálicos o engomados. Además, dependiendo de las necesidades operativas, las bombas lobulares pueden contar con conexiones industriales, sanitarias o rápidas. 

Ventajas operativas y usos recomendados

Las bombas lobulares industriales, que puedes encontrar en Boyser, destacan por su bombeo suave, que permite mantener un caudal de trabajo constante y sin pulsaciones, su fiabilidad y su sencillez de mantenimiento. Su capacidad para trabajar con fluidos de viscosidades de hasta 100.000 cPs o con partículas sólidas en suspensión de hasta 50 mm de diámetro las ha convertido en uno de los equipos para fluidos más utilizados para el tratamiento de aguas residuales, fangos, lodos, purines o residuos petrolíferos. 

Además, las bombas lobulares son bombas reversibles y autoaspirantes, aptas para caudales que pueden ir desde los 10 m3/hora a los 120 m3/hora y presiones de hasta 10 bar. Esta versatilidad operativa hace de estas bombas industriales un modelo muy empleado también en sectores como la industria alimentaria, para el trasvase de productos como el vino, el aceite y todo tipo de glucosas, pastas alimenticias o salsas concentradas; las industrias cerámicas o el sector químico, entre otros.

Bajos costes de mantenimiento y larga vida útil

Junto a su capacidad para trabajar con una amplia gama de fluidos, otra de las grandes ventajas de las bombas lobulares industriales es su larga vida útil, que las convierte en una elección muy rentable a largo plazo. Estas bombas resultan muy resistentes y cuentan con placas laterales de desgaste, fácilmente sustituibles, con unos costes de mantenimiento mínimos.

Si decides apostar por las bombas lobulares para renovar tu negocio, es importante tener en cuenta que, dependiendo de sus características particulares, como su viscosidad o su resistencia al cizallamiento, cada fluido se comporta de forma diferente. Antes de decidir, consulta con tu fabricante de bombas lobulares sobre las especificaciones técnicas que precisas -caudal, presión de trabajo, etc.-, teniendo en cuenta las necesidades específicas de tu sector, para asegurarte de obtener un rendimiento óptimo.